viernes, abril 19, 2013
Harta.
Estoy exhausta física, mental y emocionalmente, porque de repente y de la nada, todo se va para el carajo.
Terminé con Kaya. Mi propuesta de trabajo de grado no fue aprobada. El empleo de mis sueños interfiere con la universidad así que debí rechazarlo. Pronto estaré desempleada. No tengo ofertas de empleo... estrés laboral y económico sí, por montones. La universidad me está matando. Empiezo a odiarla desde lo más profundo de mis ovarios.
Me faltan siete clases además de las siete que estoy tomando ahora. No sé si alcanzo a terminarlas en diciembre.
Debo pensar en una tesis nueva para graduarme.
Debo ahorrar para irme.
Debo conseguir empleo. Rápido. Uno mejor que el anterior que me tenía la vida triste.
Debo descansar un poco más.
¿Alguien que me motive?
viernes, abril 05, 2013
Quizas lo bueno de los abismos sea que se pueden hacer puentes para cruzarlos
Hoy me he visto con mi amiga C. C y yo hemos sido amigas desde el ultimo año en el instituto... Llevamos seis años siendo inseparables incluso estando separadas.
No sé qué habria hecho sin ella.
No le veia desde hacia varios meses. La verdad es que C da señales de vida muy pocas veces, pero cuando lo hace, siempre me conmueve.
Nos sentamos en nuestra pizzeria favorita y ordenamos cuatro quesos con limonada de coco, por supuesto. Llevaba el cabello negro, cubriendo su rubio natural. Me hablo de su madre y su padrastro. Me hablo de deudas para pagar la universidad y me hablo de metas.
Me pesa mucho que nos hayamos alejado tanto. Me pesan mucho sus problemas como sé que a ella los mios. Es mi amiga y es irreemplazable, y pese a lo que digan los demas, es una gran persona y la amo, como se aman sólo a los de tu sangre. El término "familia" es mas extenso de lo que define la RAE.
Novios. Decisiones. Intentos de suicidio. Drogas. Depresion. Carreras universitarias... Son tantas las cosas que nos han llevado por caminos tan diferentes y, sin embargo puedo decir, con la seguridad misma de que no me llamo Julieta, que siempre me tendrá a orillas de un café. O una limonada de coco. O tequila, por supuesto.
No sé qué habria hecho sin ella.
No le veia desde hacia varios meses. La verdad es que C da señales de vida muy pocas veces, pero cuando lo hace, siempre me conmueve.
Nos sentamos en nuestra pizzeria favorita y ordenamos cuatro quesos con limonada de coco, por supuesto. Llevaba el cabello negro, cubriendo su rubio natural. Me hablo de su madre y su padrastro. Me hablo de deudas para pagar la universidad y me hablo de metas.
Me pesa mucho que nos hayamos alejado tanto. Me pesan mucho sus problemas como sé que a ella los mios. Es mi amiga y es irreemplazable, y pese a lo que digan los demas, es una gran persona y la amo, como se aman sólo a los de tu sangre. El término "familia" es mas extenso de lo que define la RAE.
Novios. Decisiones. Intentos de suicidio. Drogas. Depresion. Carreras universitarias... Son tantas las cosas que nos han llevado por caminos tan diferentes y, sin embargo puedo decir, con la seguridad misma de que no me llamo Julieta, que siempre me tendrá a orillas de un café. O una limonada de coco. O tequila, por supuesto.
miércoles, abril 03, 2013
47. Ser o no ser... o ser a medias. ETC ETC
Llevo varias semanas con una idea dando vueltas para escribir este post, y no me ha salido. Es que me aturde quebrarme con las palabras, pero vamos a ver si me sale.
Resulta que estuve leyendo uno de los blogs que sigo (que coño! ahora no recuerdo cuál es, pero luego les digo) y hablaba sobre ser lo que queremos ser, en cuanto a personalidad por supuesto.
Yo, que tengo una bipolaridad extrema elevada a la millonésima potencia, soy diferente a extremos con todo el mundo, y después de leer ese post, he entendido un poco porqué. (Amo el mundo blog).
Las personas, desde el primer momento, despiertan algo en uno (o no), y así, no siempre depende de nosotros mismos la manera en como nuestra personalidad sale a flote para cada uno, sin importar el grado de afecto.
Me explico...
En mi caso por ejemplo, amo a mi madre pero me cuesta horrores reconocérselo A ELLA. Puedo gritarlo a cualquier persona pero cuando llega el momento de demostrárselo, me freno. No es que ella no lo sepa. O que ella no sea cariñosa conmigo. A veces incluso me viene con regalos de la nada y yo no sé ni siquiera como decirle gracias, aunque el corazón me llore de ternura rosada por dentro.
Cosas locas.
Así me pasa, más que nada, con los miembros de mi familia. De pronto por mi niñez.
Uno no siempre es lo que quiere, sino lo que le hacen ser.
Con Kaya por ejemplo, fui como no fui con nadie NADIE DE LOS NADIES. Con él fui la Wendy tierna, la dulce, la que despierta con besos y cuenta lunares. Él me sacaba la ternura.
Con mi hermana D soy distinta. Soy seca. No suelo ser grosera con ella a menos que tengamos riña de querernos matar, que suceden a razón de una vez por mes. Pero simplemente suelo ser muy directa y seca con ella. El otro día, en agosto, me encontré a mi misma diciéndole 'Tienes que ser más sostenible con tu cuerpo y proyectarte porque lo admitas o no, tu vida sentimental es un asco'. Cruel y dura, con voz de Jillian Michaels. Soy así con ella porque aunque soy menor, siempre desde niñas, ella fue la dulce y yo la que la defendía. Se burlaban mucho de ella por ser gorda (a ver que es normal a los ocho años) y 14 años después, repercute mucho en su autoestima. Me siento muchas veces como su soporte y quien la baja de las nubes, quizás no de la mejor manera, pero es la que nos sirve.
Y no es sólo cuestión de ser... sino de creer ser. Muchas veces, sobre todo en la adolescencia, era lo que los demás me decían que era.
Mi abuela me dijo que sería estudiante de ingeniería, porque sería buena para eso. Y entonces me encontré en la facultad de ingeniería perdiendo el tiempo. La odié.
Mi médico me dijo que estaba deprimida. Desde ese día, me sentí con ganas eternas de llorar y de querer morirme.
Mi novio me decía que era una mujer tierna. Entonces lo era aún más.
Mi hermana me dice que soy una mujer fuerte, segura de sí misma e íntegra. Que siempre digo lo que pienso. Entonces lo soy también.
Mi madre me dice que soy egoísta y amargada. Entonces lo soy.
No sé... que Freud me perdone porque no soy doctora, pero creo que la personalidad va mas allá de la forma en como decidimos expresar o interactuar con los demás y con nosotros mismos. No siempre es una decisión sino influencia.
Lo importante, según lo que he aprendido, es convertir los 'defectos' que los demás nos atribuyen y hacerlos cualidades.
No soy una persona distraída. Soy creativa y pienso diferente en otras frecuencias.
No soy una persona irrealista. Tengo metas altas proporcionales a mi esfuerzo por alcanzarlas.
No estoy gorda. Simplemente no estoy completamente delgada.
Hace años que aprendí a vivir con eso, y desde entonces, sin necesidad de tener a D a mi lado, me siento más mujer que cualquier modelo de comercial de tampones, más fuerte, segura de mí misma e íntegra.
La cuestión está en quererse.
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