Niños....
Para el año 2008, en Abril, Jota conoció a mi mejor amiga, Cris.
Cris era una niña muy alocada a quien yo había conocido en el año 2005, en el colegio, pero sólo hasta el año 2007 nos volvimos mejores amigas. A Cris le confiaba todos mis secretos y ella a mí los suyos. Pero había algo que Cris no sabía: yo amaba a Jota. Si, le habia contado de lo mucho que me gustaba, pero yo acababa de terminar con Jeff y no estaba bien aceptar que ya estaba enamorada de otro...
Debí percatarme de algo cuando luego, después de ese día en que Jota y ella se conocieron, ella me preguntó si no sentia nada serio por él, debí decir la verdad, debí decirle que sí... debí percatarme de algo cuando me dijo "Julieta, me cae super bien, es muy divertido... tenias razón, tiene una sonrisa hermosa...".
Varios días después, Jota me miraba en clase. Por supuesto, a esa edad en que uno siente todo tan a flor de piel, una mirada curiosa entre cuarenta compañeros y un profesor arrogante, significaba el mundo. Era miércoles, lo recuerdo, y Jota no paraba de mirarme.
Me hace una seña de que me escribirá un papel y me lo mandará.
Me hizo mucha ilusión. Si quería decirme algo y no podía esperar a que la clase de introducción a la ingeniería se acabara... era porque era importante. Era porque yo era algo importante.
Recibo el papel y lo desdoblo ansiosa.
Nunca olvidé lo que sentí en ese momento. No durante toda nuestra relación. Abrí el papel y me encontré con su letra garabateada "Wen.... podrías darme el número de Cristina? se me ha perdido"
Muchas conclusiones saqué de esas palabras.
1. Yo no le interesaba a Jota.
2. Yo no debí mentirle a Cristina.
3. Cristina me conocía lo suficiente para saber que le mentía y no le importaba.
4. ¿lo he perdido? ¿en qué momento te lo dio?
5. No sólo yo le mentía a Cris. Ella a mí también.
6. Yo era mejor persona de lo que pensaba....
Y lo era porque le di el número y correo electrónico de mi mejor amiga al niño a quien yo amaba. Lo hice con dolor en mi corazoncito puro e inocentemente joven. Pero si eso lo hacía feliz... ¿quien era yo para quitarle eso?
Jota me había llamado por meses y yo siempre estaba con Jeff. Siempre le di prioridad a ese mal novio de colegio. Era normal que se aburriera.
Cris... en mi mente quería defenderla, justificarla. Lo hice por años y esa amistad acabó en muy malos términos, but more on that later...
Mi justificación fue simplemente que ella no lo sabía. Que yo me había encargado de eso. Y que además, Jota y yo no teníamos nada... ni ella ni él tenían responsabilidades conmigo. Así que tomé un bolígrafo e hice lo que tenía que hacer en el momento. Ser buena amiga. Ser madura. Prestar atención en clase y encontrar la forma de no llorar frente a cuarenta compañeros y un profesor arrogante.
Y niños... no iba a saber yo que cinco años después, todo esto debió ocurrir para que yo pudiera conocer a vuestro padre. Sin ese papel, sin Jota, sin Cris... sin todo lo que les contaré... hoy no viviría lo que estoy viviendo.